
El Perro Cerámico es un proyecto transdisciplinario que busca impulsar por medio de la arquitectura, el arte público y la gestión cultural mejoras significativas en los espacios públicos, así como producir formas alternas de comunicación urbana.
Conformado por profesionales en artes visuales y arquitectura graduados de la Universidad de Costa Rica, el Perro Cerámico se plantea como una alternativa social en los campos del arte público, la gestión cultural y la arquitectura, dada su especialización en metodologías de trabajo participativas y colaborativas. A partir de ellas, sus proyectos se organizan de forma horizontal con las comunidades, buscando construir con ellas nuevos imaginarios políticos y críticos a través de la creatividad y la activación de los espacios públicos.
Producciones Perro Cerámico
"Bosque en movimiento"
Mural en la Escuela Pública de Islita
Mayo-Junio 2016. Islita, Nandayure, Guanacaste, Costa Rica.







"Bosque en movimiento"
Mayo-Junio 2016. Islita, Nandayure, Guanacaste, Costa Rica.
"El bosque que se levanta frente a este cielo está lleno de vida, liquen abstracto, hongo, corteza, semilla, reflejo de sol, miel de insecto, chorros de color. Está siempre en movimiento, siempre creciendo, siempre cambiando, siempre sorprendiendo con sus detalles, sus regalos.”
Este mural, que hemos denominado "Bosque en movimiento", surge inspirado en este pequeño texto de nuestro artista Orlando Guier. Un texto que nos obligaba a dinamizar al máximo la técnica del mosaico en función de representar, en cada uno de sus elementos, esa intesidad que habita en los paisajes boscosos.
Intensidad que también vivimos en el proceso de su producción e instalación. El trabajo de producir un mural de 50 mts2 en San José y llevarlo hasta la zona costera de Guanacaste fue un reto que asumimos y resolvimos satisfactoriamente; cuestión que nos abre las puertas para trabajar en cualquier parte del país sin limitar el material, ni menos la calidad y el detalle que en su tratamiento nos caracteriza.
Ahora, esta pieza se suma a la colección del Museo Islita, un museo de arte contemporáneo al aire libre que toma como escenario esta comunidad. Este mural, en específico, se ubica en la nueva Escuela Pública de Islita, un lugar que, gracias a la Fundación Villafranca Zurcher, posibilita a las niños de la comunidad a estudiar plenamenta. Nos resulta de un infinito agrado formar parte de este proyecto y, principalemente, saber que nuestro mural será un motivo más de inspiración para ellos, una herramienta más para el desarrollo de su creatividad.